superstición

Es otra vez mi superstición. Creo que cualquier cosa se puede convertir en un presagio, consulto así un oráculo cien veces al día. No hace falta contarte los detalles. Por ejemplo, un insecto que se arrastra me va dando respuesta a mis preguntas sobre mi destino. ¿No es esto impropio de un profesor de física? […] Tal vez sí, tal vez no. Sé que la Tierra gira, pero no me avergüenzo por pensar que está quieta.

Lichtenberg. Un perfil

Gesammelte Schriften, IV, 2, p. 706

---------