EÑE 2017

Cada otoño, junto con los días que se acortan y las hojas de los árboles que amarillean, llega el Festival Eñe y el CBA se llena de escritores, pensadores y poetas en lengua castellana. La edición de 2017 se celebró en más de veinte puntos de Madrid, con el Círculo como sede central, como siempre, y estuvo dirigida por el poeta y periodista Antonio Lucas.

Como dejó escrito Lucas en el manifiesto del festival, «Porque necesitamos voces que afiancen ideas que abran espacios. Porque el único imperativo aceptable, DUDAD, no exige ser aceptado. […] Porque escribir es no aceptar lo irremediable y, a la vez, un movimiento constante. Porque leer desobedece y enseña a decir NO. Porque las letras salvan, alivian, duelen, ríen, celebran, esclarecen, desasosiegan. […] Porque queremos propagar Eñe como un laberinto de gentes que alumbran y contradicen, y no huyen del desconcierto. Porque apostamos al extravío y al placer de encontrarnos en los poemas, las novelas, el teatro, la música, el humor o el pensamiento de otros. Pero encontrarnos».

Como prueba de que este manifiesto no quedó en mera declaración de intenciones, Minerva recupera ahora tres de las conversaciones que tuvieron lugar en este festival. Marta Sanz, narradora y ensayista de singular mirada, y Ramón Andrés, pensador y poeta de inmensa erudición, conversaron sobre literatura y daño alentados por las preguntas del periodista Manuel Llorente. Hasta dónde llega la realidad y cómo la literatura puede ser estímulo, revulsivo o bálsamo para la conciencia cívica fueron los interrogantes que afrontaron Daniel Gascón, Elvira Navarro e Isaac Rosa, acompañados de la periodista Inés Martín Rodrigo como moderadora. Y la filósofa y ensayista Marina Garcés reflexionó en voz alta ante el público, respondiendo a las preguntas lanzadas por el novelista Carlos Pardo.