Nacida en Buenos Aires en 1941, Martha Argerich es considerada una de las pianistas más extraordinarias del siglo XX y XXI. Su virtuosismo, intuición musical y carácter inconfundible la han convertido en una figura de referencia universal en la historia de la música clásica. 

Argerich ofreció su primer concierto a los ocho años. En su juventud se trasladó a Europa para estudiar con grandes pedagogos como Vicente Scaramuzza, Friedrich Gulda, Nikita Magaloff, Madeleine Lipatti y Arturo Benedetti Michelangeli, entre otros. 

Su consagración internacional llegó en 1965, al ganar el prestigioso Concurso Internacional de Piano Frédéric Chopin, celebrado en Varsovia. Desde entonces, ha actuado en las más destacadas salas del mundo y colaborado con las más prestigiosas orquestas y directores, incluyendo a Claudio Abbado, Charles Dutoit, Daniel Barenboim, Riccardo Muti y Seiji Ozawa. 

Aunque su repertorio como solista es inmenso, en las últimas décadas ha priorizado la música de cámara, ámbito donde despliega una sensibilidad única. Argerich también ha destacado por su labor en la promoción de jóvenes talentos, a través de festivales como el Progetto Martha Argerich, en Lugano y el ciclo Les coups de cœur, donde comparte escenario con nuevas generaciones de músicos, impulsando una visión colaborativa y generosa del arte.