El comendador Alberto Nardi ha alcanzado una buena posición social gracias a un matrimonio de conveniencia, aunque sigue soñando con seducir a cuantas mujeres se ponen a su alcance. Es un hombre que tiene mala suerte en los negocios. Los acreedores le siguen por todas partes y él, con mentiras, logra esquivarlos. En su vida existe una pesadilla: su mujer, Elvira, fea y millonaria. El sueño de Alberto es ser heredero de la fortuna de su mujer, y no duda en prepararle en entierro. Un día recibe la noticia de que su mujer, en un viaje de placer, ha muerto en un accidente.