Las actividades sensoriales ayudan a los más pequeños a comprender y procesar la realidad. Los adultos, por nuestra parte, pocas veces tomamos conciencia de la amplitud de nuestros sentidos. La participación conjunta de padres e hijos en actividades de implicación sensorial, como la que aquí presentamos, permite enriquecer y fortalecer sus vínculos.

En este espectáculo, la luz, el sonido, el color y los materiales harán viajar nuestros sentidos mediante una propuesta basada en la exploración de las posibilidades plásticas del cuerpo humano. Se trata de una puesta escena en la que hacen aparición: el barro como material primigenio de la tierra (tacto); los efectos sonoros a partir de materiales naturales (oído); y la dramaturgia corporal en la construcción de formas, tamaños y movimiento (vista).

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Espectáculo para niños a partir de 2 años

Dirección, creación e interpretación: Mónica González Megolla

Producción: Quasar Teatro