La obra más contemporánea de Strindberg, precursora de las tendencias de vanguardia del teatro de nuestros días, se centra en la hipocresía social, la incomunicación y la avaricia. Strindberg, en El pelícano, como en todas sus demás obras, da muestra de su muy famosa misoginia, mostrándonos el final de una familia que se autodestruye con lo que el autor llama «violencia mental».

El desencadenante es la aparición del joven teniente Axel, cuyo encanto personal atrae la atención de las mujeres, madre e hija, y despierta los celos de padre e hijo, lo que provoca disputas, recelos y rupturas esporádicas y definitivas. Strindberg nos describe a los personajes con apenas unos trazos y una ubicación espacio-temporal no siempre comprensible en una primera lectura. El dramaturgo también arremete en esta obra contra la excesiva importancia que se da al dinero y a la posición social frente a los valores morales, la inteligencia, la bondad y el amor.

Dirección: Tono Berti
Compañía: Escena Cero

Organiza:
CBA

Colabora:
Embajada de Suecia

[entrada 12? ? reducido 10?]

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