Pero donde hay peligro… Capitalismo, catástrofe y permanencia de la utopía
Son muchos los signos que parecen confirmar que vivimos un momento de crisis profunda, marcado por amenazas de catástrofe e involución civilizadora. La contemporaneidad se ve atravesada por múltiples cataclismos: ecológicos, sociales, económicos, geopolíticos, demográficos y psíquicos, todos ellos asociados al incremento de la desposesión, el auge de tendencias autoritarias, la normalización de la violencia y el conflicto bélico. La lógica de funcionamiento capitalista parece haber agotado su capacidad de afrontar y resolver estas crisis, instalando una nueva normalidad que apunta a una suerte de “apocalipsis desigual y combinado”.
Ante este panorama, cabe preguntarse: ¿cómo hacerle frente? A mediados del siglo XX, autores como Walter Benjamin y Theodor W. Adorno concibieron la historia como una “catástrofe permanente”, mientras que Günther Anders habló de un “tiempo del fin”. Para ellos, la catástrofe no era una amenaza futura, sino una realidad ya presente, que de no ser detenida se intensificaría hasta conducir a la aniquilación. Sus diagnósticos sobre la transformación de la subjetividad, la lógica autodestructiva de la autoconservación y la dominación de la naturaleza parecen hoy más vigentes que nunca.
“Pero donde hay peligro / crece también lo que nos salva”, escribió Hölderlin, en un verso citado por Benjamin. ¿Sigue teniendo sentido esta máxima? Si la catástrofe se ha convertido en el modo normal de reproducción del orden capitalista, la tarea de la teoría crítica no puede limitarse a cartografiar amenazas, sino que debe también buscar las huellas de lo posible, movilizar energías capaces de romper las inercias civilizatorias que agravan la crisis.
En esta conferencia, impartida por Jordi Maiso, nos hicimos preguntas como: ¿En qué podría consistir hoy un impulso utópico que impida resignarse a lo que parece inevitable y pueda enlazar con elementos capaces de evitar la consumación de la catástrofe? ¿Cómo entender hoy, en definitiva, los vínculos entre catástrofe, crítica y utopía sin negar la gravedad de lo que amenaza ni ofrecer salidas meramente especulativas?