Coincidiendo con la exposición Noronha da Costa Revisitado, organizada en el Centro Cultural de Belém, la Cinemateca Portuguesa revisitó en 2004 la obra cinematográfica de Luís Noronha da Costa (Lisboa, 1942-2020), presentándolo como un pintor que había realizado una obra pictórica, escultórica, arquitectónica y cinematográfica, pero también como un autor, en sí mismo, de una obra de cine. Los trabajos en película de Noronha da Costa forman un corpus fílmico incluso en un sentido metafórico, pues las relaciones entre su pintura y su obra cinematográfica son evidentes. Sin embargo, Noronha da Costa es también un cineasta en sentido propio. En los años 70, realizó numerosas películas, las cuales siempre consideró fundamentales en su recorrido estético, si bien sólo una tuvo una producción menos casera, y, aunque nunca se estrenó comercialmente, consiguió cierta difusión: O Constructor de Anjos (1978-1979).

A la revelación de 2004 –el ciclo organizado por aquel entonces fue la primera oportunidad para dar a ver toda la obra cinematográfica que se conserva de Noronha da Costa, la cual veremos también en este ciclo al completo, depositada por la Fundação Calouste Gulbenkian en la Cinemateca en 1995, en 8mm, Super 8mm y 16mm, siendo después preservada por la Cinemateca en 16mm–, le sigue ahora este programa, la posibilidad de obtener una nueva mirada de conjunto sobre estas películas góticas y epifánicas de Luis Noronha da Costa de los años 70.

Como escribió João Bénard da Costa, con la riqueza de una declaración propia de Leonardo da Vinci, «me gustaría, siempre desde mi punto de vista, intentar realizar una traducción: “Lo que de él (del fuego) ves, no es lo que antes era y ya no es. Lo que es de él, de él es, el Cuerpo, antes de ser llama. En el cine: ¿no serán los Cuerpos quemados por la imagen?”. Esta larga cita es la mejor introducción posible a O Constructor de Anjos: cuerpos (espacios) quemados por la imagen. En el cine, la imagen que vimos antes no fue, y ya no es. Y esa imagen, tan inexistente como la del fuego, es el Cuerpo del cine. En ella, como dice el propio Luís Noronha da Costa en esa cita, vemos los sueños, sueños que el cine “sólo espejaba cuando era asumido como Muerte”».

[Presentación de las sesiones a cargo de Francisco Algarín Navarro (comisario del ciclo)]

Organiza Embajada de Portugal en España y CBA; colabora: Cinemateca Portuguesa